martes, 12 de octubre de 2010

Tan fácil y compleja...

No escribo y al no escribir digo,
que persigo una única palabra insultante y caprichosa.
Dandí sin capa ni espada –dice el comandante-
de este barquito viejo que lleva féminas encadenadas.


Vagan las prendas de la noche.
Tirando gotas de pudor a sudorosos rostros,
y miran al vacío desde el pórtico pensativo,
donde flaquean las estatuas estigmatizadas.


Seguiré caminando algún tiempo,
esquivando balas de Luna agrias de amor,
en sintonía con nuestra propia condición humana:
Tan fácil y tan compleja es la belleza de una flor.


Abriré paso a todos los nuevos recuerdos,
que deseen atravesar el tuétano de algún frágil espejo;
mas sólo la maravilla que nace piensa,
que el embrión que las Musas gestan
será en un idílico paisaje de bellas cenicientas.


Rompo las condiciones y me acomodo a no decir nada.
A esperar que el tiempo pase. Para almacenar nuevos embalses.
De aguas templadas. Dulces y saladas…
Nuevos sentimientos que recuperen el empeño.
Para beber del mismísimo “Leteo” y olvidar lo escrito en vidas pasadas.


"La mejor motivación es aquella que nos engaña y nos obliga a caminar por un sendero aparentemente nuevo..."

sábado, 25 de septiembre de 2010

Se perdió...

A donde fue…
Dicen que se perdió en los mares de sus propias lágrimas.
Allá en la lejanía, donde el vértice afila la vista,
cautiva Dios sus propios límites, sin pena ni compañía.

Nunca hubo nadie…
Ni flores, ni Querubines, sólo un fugaz remordimiento;
limpio e inocente, cual muñeco de trapo que duerme.
Ni las plegarias pudieron plagiar el dolor de su tristeza.

Declinaba su sonrisa...
Mi niño lindo se sentaba alegre en su reflejo de Luna,
y se veía retozando solo entre despojos de espuma.
Agria sus dulces manos que infunde los juguetes rotos.

Diáfana su ingenua mirada…
Y dentro de su iris, el Sol pálido de la impoluta mañana
se columpiaba en las curvas y desvanes para alegrar su alma.
Tantos recuerdos bajo la llave del miedo en aquellos ojos.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Más que Amor...

Más que Amor. Amaba.
Amaba las sombras.
Los flecos vestían de palomas rabiosas
los atardeceres de azafrán y agua.
Las marchas dialogaban en pentagramas
de eucalipto y colibríes.

Reventaban de miel las colmenas de mis versos,
huracanes y tempestades fueron cegados al vuelo.

Más que Amor. Amén.
Amén de tus labios y los míos,
que se fundían en una sola oración perpetua.
En la Ermita de mis complejos,
madrigueras de un solo beso.
De mi silencio solo una voz ronca dijo te quiero.

Desperdigaban las colinas de viento y marea,
teatrillo de tus pasiones veraniegas.

Más que Amar al desamor,
amé por encima de todo
los desagravios que la vida me impuso;
jugué al ajedrez con mi propio Ego,
y aposté en el juego todo menos dinero.
Los recuerdos de mi infancia, los malos y los buenos.

Perdí la partida pero amé por la lucha y la vida.
Mil auroras resplandecían en los mares de mis pupilas.

domingo, 15 de agosto de 2010

"Siete Pétalos" en una barquita.

En un dedal el sombrero octogenario,
la banda de marfil en las caderas elíseas.
En clave de Sol el impuntual calendario,
arranca de su armario la ropa vieja y maltrecha.

Esqueletos dormidos sobre los recuerdos:
El mercado, calle vieja, la plazuela…
y un coro de chiquillos esperando la cena;
timonel de sus vidas madre que todo lo lleva.

Rebrinca el cincel que ciñe tus arrugas,
la lana y el croché de tus labios de costura.
Bajo la cuesta del Sol sombras de un pliegue tardío
cantaba la buena nueva por haberte conocido.

En una barquita pequeña va navegando la Azucena,
con siete pétalos en flor savia de amor en su venas.
Tras el cielo quebradizo despierta al flote una isleta.
Gorriones y girasoles pintaban rostros de belleza.

lunes, 2 de agosto de 2010

Tarde y Noche.

Ha comenzado la tarde,
la luz viene pulida,
cabalgando entre paisajes,
retozan las golondrinas.

La noche besa a bocados,
el diminuto horizonte;
la fiebre se aleja despacio,
por recovecos y ruinas.

Asiento mis reflexiones,
en la cornisa del mundo,
se asoman encandilados,
los trovadores confusos.

Ha comenzado la noche,
y me sorprende despierto,
recostado sobre un lecho,
de presagios venideros.

La niebla baja encendida,
buscando la yesca seca,
para empapar las caricias,
con nubes de agua fresca.

La calma invade el tacto,
de un apacible encuentro.
Un ruido de cristales,
enturbian nuestros secretos.

jueves, 29 de julio de 2010

En la ciudad de las hormigas.

En la ciudad de las hormigas,
aquella donde brota el despecho;
muere la gente y genera vida,
en cada astilla del momento.
Muere el instante y nace el recuerdo.

En cada lugar diminuto,
el cupo de un espacio eterno.
Las miradas colman de raíces,
como serpientes exhaustas,
enredadas en el beso.

En la ciudad de las hormigas,
autómatas y ebria de gestos;
clarea el nuevo día al desvelo.
Laberintos donde se pierden,
la sangre de nuestros cuerpos.

En cada lugar un crepúsculo,
de inesperadas emociones.
Revolotea el dolor como mariposas,
descontroladas y rabiosas,
por cárceles de fuego.

lunes, 19 de julio de 2010

Murmullo, pulso y silencio.

Impoluto manantial de recuerdos,
al río de un desaliñado lecho;
balancea la torpe boca el beso,
campanean los relojes viejos.

Murmullo, pulso y silencio.
Y en el murmullo el pulso.
Y en el pulso el silencio.
Y en el silencio. El parto de algo nuevo.

El suave delirio del viento,
zarandea la madrugada inquieta,
las estrellas se mantienen mustias,
y vuelcan su naturaleza.

Murmullo, pulso y silencio.
Y en el murmullo la fragua.
Y en el pulso el pacto.
Y en el silencio. El ruido del pensamiento.



("Si el Silencio hablara, el ser humano no estaria preparado para escuchar la única razón por la que se mantuvo tanto tiempo callado")

jueves, 15 de julio de 2010

Cárcel de piedra.

Las furias del holocausto en cada veta.
El grillo en los abismos de cera.
Las lágrimas que a merced del tiempo queman;
queman mis manos la fisura de tus piernas.

Su Morse desenfrenado me lleva,
por laberintos y desconocidas praderas,
me encierro tras la única verja,
que aleja el sopor y la condena.

Encuentro en los pulmones dos madrigueras.
Marea de suspiros que me encierran.
Ahuyento adversidades y el Alma vuela.
Vuelan mis dedos en su temblor de seda.

jueves, 8 de julio de 2010

Soñemos...

Enhebras. Enredas. Miradas y Misterios.
El dedo en el labio dictando silencio.
Cuidado, hablemos bajito,
es solo un recuerdo que prende dormido.

A ver comencemos.
Si pinto en el bosque un destello
con gotas de lluvias que rocen tu pelo,
y empuño palabras que abracen las costura de tu cuerpo.
¿Qué ocurre? No entiendo.
Que frio el encuentro, el hielo…

A ver comencemos de nuevo.
Si exclamo en la noche tu nombre y no escucho el eco.
¿Será porque estas enfadada o encierras un mal pensamiento?
La tarde dorada desprende su aliento.
Te llamo y tan solo un jilguero se exhibe
pintando figuras lejanas en mis sueños.

A ve insistamos ¿Comenzamos de nuevo?
El dedo en el labio dictando silencio.

Soñemos…

(Una Gota de agua en el cielo no hace nada,
pero un millón de gotas forman un arcoíris)

lunes, 5 de julio de 2010

La Luna y la mirilla.

Andaba la Luna en la mirilla,
por donde el Sol se asomaba.
Crestas y flecos lucía,
mientras la aurora cantaba.

Ungía el amor las pasiones,
al canto del último gallo.
Pasaban los días callado.
Gritaban mis labios sellados .

La piel arrastraba el fuego,
por los poros del firmamento.
El hielo derritió trapecios,
en los montículos del verbo.

(La Luna y la mirilla:
Sol de Hielo...
Luna de Fuego...)


jueves, 1 de julio de 2010

Tú...

Tú. Con tu mirada.
Dedo que señala el encierro.
Yo. Con las palabras.
Tiza y cal en el destierro.

Tú. Que ensordece mi espacio;
virando el indivisible olvido.
Yo. Que me ahogo en el tuyo;
cortando tallos de sigilo.

Yo. Que nada tuve,
y luché por no tenerlo.
Tú. Que lo tuviste todo,
desde las flores de invierno.

Yo. Que fuí eco en el espacio sonoro.
Tú. Que naufragaste en mares escarpados.

Tú y Yo. Los Dos.
Tan diferente y entrelazados.

Tú. Filigrana de azufre en mis labios.
Yo. Cartógrafo de inseparables pactos.

miércoles, 30 de junio de 2010

Mañana de sonrisa delicada.


Colindan los sentimientos,
al color de tu piel tersa,
y el viento teje secretos,
tras el candil de tus rarezas.

Escondes la llave y aferras;
y llenas de curvas mi cielo,
tan solo el amor penetra,
cuando llega el desconsuelo.

martes, 29 de junio de 2010

Cuatro de la madrugada

Cuatro de la madrugada, la brisa me zarandea en la cama. Frente a mi ventana; la noche en pausa. Un vértigo tambalea los olivos indiscretos; la luz pálida, acaricia mi rostro. Despierto en la estación de los sueños.
El iris dilatado, amplia su aureola buscando… buscando… Nada encuentra; pero todo le rodea. Hay un coro de sentidos que se manifiestan latentes, de nuevo me encuentro sumiso del sueño. Otra vez el mismo paisaje y el niño que anda por los infiernos grises. ”Al camino lo que es del camino
Las nubes no traen buen augurio, el horizonte viene fausto con gritos de malas tempestades y de prisas forzadas. Me inquieta el niño que llevo vestido .Las nubes van avanzando colosalmente erguidas y conquistando el cielo omnisciente. Bajo la mirada; baja el niño la mirada; y ahí tras el frontón de cemento y cerámica, se encuentra el colosal árbol desnudo; intimidando con su redes y grietas; encallando 1010 cometas de arcoíris.
El niño mira el cielo y aun cree que tiene tiempo, se adueña de la esperanza para escalar el árbol y rescatar algunas de las cometas verdes, amarillas, azules, turquesas y un enjambre de colas de papel de seda inquietas y nerviosas que no se deciden.
Escala el niño, escalo Yo. Al cuarto rascacielos los dedos sufren en cada rama áspera .Miro al vacio y mira el niño. Miro el cielo que ya se enturbia sobre mi cabeza, aun la ilusión brilla en la pupila de la inocencia. Brillan sus ojos .No los míos.
Tan solo es alargar un poquito el brazo y alcanzar una de esas cometas, necesito rescatarlas de lo previsiblemente adverso. El cielo ya comienza a llorar y un viento huracanado se despierta, lo roza sus yemas, lo roza mis yemas. Tal solo quiero alcanzar una de esas cometas que ya muestran síntomas y heridas.
La lluvia me destierra desde las alturas. Me baña y mil bofetadas de viento y agua me arrancan del árbol. Caigo al vacio absoluto y un colchón de truenos y relámpagos se despiden expulsándome de lo onírico.
De nuevo al cuarto parpadeo el iris se dilata y fluye la luz, esta vez tibia. Me despierto y en el andén de mi ventana la Luna me observa.Le observa…Nos Observa…



lunes, 28 de junio de 2010

"S.E.R.E.N.D.I.P.I.A"

Si el todo pende de un hilo. Hilo que nace cada noche.
Endiablado el equilibrio. Trapecios de pulpa las emociones.
Refunfuñan los abismos. Tras el peldaño del exilio.
Enredado en las esporas. Hiedra que trepará mi alcoba.
Nunca fue casual tu encuentro. Ni casualidad el beso.
Disipado en el mar pienso. Tras el idilio de los versos.
Impredecible el convento. Donde mantuve etéreos rezos.
Perplejo por causa y efecto: El murmullo del sotavento.
Inquieto el desatino, y por dudar no dudo ni quiero.
Al Amor lo fugaz y divino. Los fortuitos deseos.

domingo, 27 de junio de 2010

Preambulo de un Sueño y de un Juego

Embaucada en un bosque de azahar.
Mi niña se despierta frágil, con ganas de andar.
Pasitos de templanza... ¡y a correr!
¡Cuán sereno esta el cielo cuando te ve jugar!

Deditos que emborronan temperas;
pigmentos de azafrán,
y al tercer salto, gritas, ¡ y al suelo!
que las mariposillas juegan con tu zig zag.

Dame un renglón torcido,
para poder aprender vida,
como calarme de tus melodías, de tu pura sonrisa.
Balbucea mi nombre. Sin picardía.

Tímida miel y garabatos tu alegría,
todo son sorpresas mi niña, al nuevo día,
y al Sol tu diadema de Perseidas,
que quiebran al quinto de mis suspiros.

No te extrañe que nada pasa mi lucerillo,
tan solo es un pasaje de melancolía,
que viene y va mi niña linda,
con tu mirada.
Que viene y va vida mía.

sábado, 26 de junio de 2010

Tycho

A mi luz tus ojos pardos.
Vientre de mis ideas.
Flor del pensamiento puro,
que impone melodías pétreas.

Subyacente. Aferrada.
Candencia flamenca y gitana,
que acaricia tu rostro de Luna ,
y abraza mil primaveras.

sábado, 13 de febrero de 2010

Me despojo

Por un río de piedra camino, sin indiferencia alguna…
Solo escarbando pasos que marquen la sepultura,
para pisar las mismas huellas y recaer en tus brazos…
Por cada paso un silencio, y en cada silencio el despojo.
Me despojo del verso que hiere
y del recuerdo que atrapa.,
Me despojo de las miradas que encojen,
y dejan extasiada mi alma.
Solo me llevo el ahora, y mas tarde del ayer, el mañana.
Que es translúcido como el cielo,
cuando de turquesa se exhibe,
y latente como la palabra, que no hace falta presenciarla.
Por cada paso un silencio, y en cada silencio el despojo.
Me despojo del rencor y la duda ,
del oxido de los gestos y otras mascaras.
Me despojo de los velos invisibles,
que se impone entre ambas.


Solo dos Palabras

Solo dos palabras,
y un jardín de flores secas,
ascuas del amor poeta,
y de las ánforas derramadas.
Solo dos virtudes:
La agilidad y la pureza…
Para tirar palabras a un folio,
y rescatarlas de la hoguera.
Solo yo me encontraba.
Solo yo conmigo mismo.
Pues la soledad no se hallaba.
Sola y acompañada.
La luz del cielo y la mañana.

domingo, 10 de enero de 2010

Y a pesar de todo...

Hoy caminan los recuerdos.
Mientras el agua blanca caía, cual pétalos de almendros a través de lo abstracto y del invisible cristal. Yo fascinado veía, como el paisaje cambiante e incoloro, era teñido paulatinamente de blanco, al igual que lo incomprensible se adueñaba de mí ser; y mis inertes manos, acariciaban al unísono una fugaz estrella de escarcha…

Hoy caminan los senderos.
Que sin necesidad de huellas ni de cicatrices incrustadas; bifurcan destinos paralelos y pensamientos confusos que se desdoblan errantes, fluyendo por imaginarios sueños. Recreándose en vidas ficticias, en palabras imaginarias y noches apasionadas.

Y a pesar de todo, hoy; los caminos siguen siendo lejos, distantes y peligrosos. Como el delirante e hipnótico brillo de una luciérnaga en pleno desierto. Casi tan inalcanzables como un sinfín de crepúsculos, y tan adictivo como el sabor del miedo.

Pero siempre hay algo dulce y latente en el Yo de cada persona, que fluye intermitentemente, igual que el caudal de un río en diferentes estaciones. Algo por lo que merece la pena luchar en vida, aunque la ceguera permanente del miedo no permita respirar los verdaderos aromas del universo.

Y a pesar de todo …

jueves, 7 de enero de 2010

Roca de Luna


Roca de Luna,
que reposa sobre el cielo.
Como corona de estrellas,
asfixiadas por el fuego.

Nadie la ve.
Es transparente, casi tan gélida;
que al abrir su capa se deshiela.
Se desmarca entre el consuelo.

Todos les rezan y cantan tal lírica,
tan silenciosa e invisible,
que se pierde y se disipa.

Todos piensan y ninguno dicen:
¿Cuan cobarde trovador,
es capaz de invocar
a los cuatro elementos intangibles?

Roca de Luna,
sobre el cenit del mundo,
a los pasos del rey ,
despotrica el trotamundo.

Rompen los cuadros.
Queman sin fuego,
tal herida es de dolor
que el frío agrava en silencio.

Corren y buscan.
Trazan paisajes,
en etéreos manuscritos,
rescatados del mar muerto.
Claro; que al mantenerse en vela,
más traicionero es el beso,
en los brazos de Morfeo.

Despierto ya bienhallado
la conciencia vuelve lucida,
y me da la bienvenida:
¡Despierta Sr. Despierta! –exclamo-
¡Que terrible sufrimiento es no saber que sueño!

lunes, 4 de enero de 2010

"Prefiero comprar el silencio"


"Terrible es el silencio que impone,
como llama de luz que se apaga en la noche.
A veces creo que me disipo, cuando mi yo se duerme.
Se duerme forjado en frases secretas ,en profundos clamores,
y me veo en el reflejo y no me encuentro.
Tal silueta es la mía que algún día miento
por mentirme cada día.
Prefiero comprar el silencio.
Prefiero comprar el silencio o dormir despierto sin mentiras,
sin personajes, sin mascaras, sin aparentar vidas ficticias.
Hoy me veo en el espejo y pienso:
Si soy yo, si es mi imagen, si esta sensación que llevo adentro,
puede pintar mil paisajes; mil palabras, mil peajes, mil atajos...
y a veces salen palabras que en el vaho del cristal lacran:
Prefiero comprar el silencio.
Prefiero comprar el silencio,
o dormir despierto sin mentiras,
sin personajes, sin mascaras, sin aparentar vidas ficticias"

"Metafora de una Adivinanza"

"No sabes que existo; no encuentro sentido. Entre sueños holgados suena el laud de un mirlo.....Miento, y si me despierto muero. Veo aun más lejos lo reflejos del tiempo. ¿Cuán pudiera ver imagenes en color que para para mi son en blanco y negro? Pintar los olores que siento: azar y azul añil; flor de almendro, mariposas de invisibles "hilos" que mecen la cuna del viento; y en el Lejano Oriente...

El sonido del "Bansuri " arrebata el silencio, y danza como en aquella vieja película, la del "Séptimo Sello". Los campos se tiñen, en vez de blanco; de negro. Pero no de el negro de la desilución ,ni de las lamentaciones; sino de el negro del firmamento, el de las ilusiones, el de la reflexión ,el del Brillo en los corazones, etc.. (...)"